Las siguientes instrucciones de primeros auxilios se consideran aplicables para la mayoría de los incidentes. Sin embargo, un estudio del gas involucrado puede hacer recomendables aplicar primeros auxilios adicionales o completamente diferentes. Consulte la hoja de datos de seguridad del material (HDS) para obtener recomendaciones específicas.

Si una persona se asfixia, lleve a la víctima a un área no contaminada. Mantenga a la persona abrigada y tranquila. Si no respira, administre respiración artificial u oxígeno. Si tiene dificultad para respirar, administre oxígeno y llame a un médico.

Lleve a la víctima a un área no contaminada. Si no respira, administre respiración artificial u oxígeno por resucitador. Si respira con dificultad, entreguele oxígeno. Si un gas irritante o corrosivo entra en contacto con los ojos, lávese suavemente y con abundante agua durante al menos 15 minutos. Separe suavemente las ropas para promover una irrigación completa.

Si un gas corrosivo entra en contacto con la piel, enjuague el área afectada con grandes cantidades de agua durante al menos 15 minutos, mientras se quita la ropa y los zapatos contaminados. Llame a un médico. No aplique ungüentos a menos que lo recete un médico.

Si una persona inhala un gas tóxico o si se sospecha que lo ha inhalado, lleve a la víctima a un área no contaminada. Si respira con dificultad, administre oxígeno. Si no respira, proporcione respiración artificial u oxígeno mediante un resucitador. Llame a un médico. Mantenga a la persona abrigada y tranquila. En el caso de contacto con los ojos o la piel, siga los procedimientos de primeros auxilios para irritantes. Las personas expuestas o potencialmente expuestas deben evitar el esfuerzo y pueden requerir observación médica. Los síntomas de la exposición pueden demorar en llegar.

Algunos gases comprimidos se encuentran en fase líquida en el cilindro. Cuando el líquido se libera a la presión atmosférica, se vaporiza rápidamente y absorbe grandes cantidades de calor del entorno. Si el líquido entra en contacto con el cuerpo, absorbe calor del tejido y provoca «quemaduras». En caso de lesión por frío, enjuague suavemente la zona afectada con agua tibia (39°C – 41°C). Llame a un médico. 

Los tejidos congelados son extremadamente vulnerables a lesiones adicionales y deben manipularse con cuidado antes y después de descongelarlos. Nunca aplique calor directo. Los tejidos congelados deben descongelarse suavemente con agua tibia (39°C – 41°C). Las quemaduras criogénicas requieren atención médica. Los tejidos congelados o descongelados deben protegerse con una cubierta suelta (sábana o vendaje) mientras se transporta al paciente.

Cuando los líquidos criogénicos entran en contacto con el tejido, producen un daño similar a las quemaduras térmicas y provocan una congelación grave con gran destrucción de tejido. En caso de contacto, enjuague las áreas afectadas con grandes volúmenes de agua tibia (39°C – 41°C). No aplique calor. Afloje la ropa que pueda restringir la circulación. Aplique un apósito protector estéril en el área afectada. Llame a un médico.